Ay, hace tiempo los sumisos te traían bombones, y chucherías, zapatos, ropa fetish o una fusta nueva.
De un tiempo a esta parte, con todo esto de la pandemia y demás, los gustos y necesidades han cambiado y ahora los sumisos se humillan ante ti con nuevos y exóticos productos. Y sino, mirad al último perro y lo que me ha traído:

Todo lo que una dómina puede desear. Ja, ja, ja, ja.
Quiero aprovechar y desearos a todos unas felices fiestas y un año nuevo lleno de abundancia.
Nos seguimos viendo, leyendo y, si caéis en mis redes, siendo azotados y puestos a mis pies. 😉