Hablemos de algunos fetiches en los que escudarnos para probar cosas, o usándolos como plataforma para poder acceder a algunas partes de nuestra personalidad, deseos y romper tabúes.
Uno de estos es el hypno kink, el fetiche por el hipnotismo. Quede claro que no siempre se produce un estado de trance hipntóico, solo basta con ambas partes lo acuerden y se simule un trance y un proceso de hipnosis. Bajo esta premisa que es algo más amplia pero muy cercana a un juego de rol, el hipnotizado (real o no, pero no vamos a entrar en el terreno de la hipnosis real, que no es lo que nos ocupa, sino su kink) carece de trabas y de cualquier barrera (salvo los acuerdos previos sobre límites) para hacer cosas que de no mediar esta excusa y fetiche no se vería capaz de realizar.
Cuando esto sucede la parte dominante, quien hipnotiza, somete a trance al hipnotizado. Acordados estos roles muchos sumisos hipnotizado se sienten muy libre, desinhibidos y sometidos a la autoridad del hipnotizador para realizar cualquier actividad que le demande puesto que «tiene el control de su mente y su voluntad». Un hypno dom o hypnodomme conducirá a su sumiso en trance a actividades diversas sabiendo bien qué es lo que esa parte espera:
- Confesar sus deseos más ocultos
- Someterse a humillaciones
- Someterse a deseos sexuales que sin el trance considerarían tabú
- Acatar órdenes de cualquier tipo sabiendo que no pueden resistirse por el trance
- Realizar actividades con total desinhibición
El ritual
Toda actividad del fetiche de hipnosis pasa por los mismos pasos de un trance real: un lugar tranquilo donde se vaya a realizar la actividad, una breve charla con el hipnotizador, un ritual de hipnosis por diversos medios acordados, ya sea mirando la luz de una vela y escuchando la voz del hipnotizador, viendo una serie de imágenes, el reloj o péndulo ante la mirada, y finalmente, el trance.
Lo mismo para la finalización de la sesión donde el hipnotizado saldrá del trance a una orden de su hipnotizador, que lo hará en el momento que considere oportuno, ya sea para causarle vergüenza y humillación o con la simulación de no recordar nada.
Actividades
Dentro del hipno kink se realizan muchísimas actividades (ya sabéis, dentro de lo que tiene, todo consensuado y demás).
Humillación, cambio de roles, fantasías de ageplay, fornifilia, alucinaciones, cambio de personalidad… Hay mucho que explotar según los deseos y las fantasías de cada cual.