Eres su puta y te encanta. Tu novia y tú rivalizáis en gemidos de placer cada vez más clamorosos. Ambos sois embestidos sin piedad con una crudeza impúdica bestial. Dos furcias ensartadas gimoteando como trofeos[…]
Continuar leyendo …
Eres su puta y te encanta. Tu novia y tú rivalizáis en gemidos de placer cada vez más clamorosos. Ambos sois embestidos sin piedad con una crudeza impúdica bestial. Dos furcias ensartadas gimoteando como trofeos[…]
No se cómo empezar esta reflexión. Es una de las experiencias más difíciles de explicar con palabras, porque las sensaciones que uno siente cada segundo que pasa con la diosa Ghalia no se pueden transmitir,[…]