Spanking manual: el placer de una buena azotaina

El placer de un buen spanking está en nuestras manos… literalmente. Una de las herramientas más cómodas de las que disponemos es precisamente la mano, lejos de las complicaciones de si pala de madera, pala de plástico, que si esta pesa, que si aquella está acolchada… Usada muchas veces para «calentar» antes de empezar una …